jueves, 6 de diciembre de 2012

MANGAS


No hay parte de nuestra indumentaria que no sea protagonista algunas veces, y las mangas no son una excepción.

Pueden ser mucho más que una forma de abrigarnos los brazos. A veces, son la estrella de la prenda.

Así que, como la manga común ya la tratamos con los patrones básicos, iremos viendo otras posibilidades, algunas de calle, otras de noche, y aún otras con historia o para escenario, como ropa de época, para cine o teatro.

Vamos a empezar por una de las más sencillas e inocentes:


MANGA FAROL


Es más que nada usada para ropa infantil, de niña, aunque ocasionalmente puede trepar a otros niveles. Es más ancha de lo normal, se frunce, para formar una especie de farolito que, generalmente, tiene una sujeción en el bajo, de manera que los frunces se mantienen por la costura en la sisa, y por el borde que va en el brazo,  que puede tener diferentes detalles.

Puede ser terminada con un bies a la vista, con un puño delgado, elastizada, o incluso, dado el modelo, terminar como farol abierto, sin nada que la sujete por el bajo.

Aquí tenemos algunas posibilidades:


 

Esta es la más común manga farol para niñas. Todas hemos tenido varias cuando fuimos pequeñas, sin falta, y ninguna de las que tenemos hijas se las hemos hecho faltar tampoco.


 

Una variante, que en vez de frunces tiene tablas. Es un farol voluminoso, y sujeta las tablas en el bajo con un pespunte a la vista.


 

Aquí el farol no cierra abajo, y tiene una abertura en el costado externo, con dos presillas de tela y botones.


 

Esta tiene como terminación una jareta, (dobladillo de cierto ancho, por donde se pasa una cinta, cordón o elástico) con elástico, en este caso, lo que la convierte en más corta o más larga sin dificultad.


 

Como vemos, el tipo de tela y volúmen del ancho puede variar muchísimo el resultado final.


 
 
Una gran farol, más ancha en el puño que en la sisa, rematada con tan importante puño, no requiere más detalle para que la prenda cobre importancia.



Este puño, a pesar de ser elastizado, no permite, por sus varios elásticos, ser "remangada" con facilidad. Se torna más resistente que con jareta simple y elástico único.


 

He aquí un caso en que la manga farol sube al escenario. La susodicha es de terciopelo, como el cuerpo del vestido, y está sobrepuesta encima de otra de material más liviano y transparente, como podría ser gasa.

Y no, no olvidé que no ha figurado el patrón todavía, así que aquí va:


 
 
Al patrón de manga base, se le practican unos cortes a lo largo, que pueden ser uno central y otros dos en sus otros centros, llenando los espacios como se muestra, aumentando algo el largo como consecuencia, dado que debe ir despegada y tomar volúmen, conque necesitará tela con que hacerlo.
 
Si preferimos, podemos hacer más cortes, en espacios simétricos, o sea que podríamos abrir ésta en la mitad de cada uno de los cuatro cuartos que nos han quedado.
 
Cuando hagáis la primera manga farol, guardar el patrón. Seguro tendréis otras ocasiones en que usarlo, y así vais formando vuestra "patronteca" (¿Que no existe la palabra?... pues aquí sí.)
 
¡BUENA MAÑANA!
 
 
 













2 comentarios:

  1. La cuna de la patroneca...muchas gracias por compartir su conocimiento. Una persona que tiene su propio vocabulario, es merecedora de todo mis respetos; pues soy además de ser costurera por hobby, mi más grande pasión es el lenguaje en todas sus manifestaciones. La he agregado a mi diccionario particular, pues hacía falta en el glosario de nuestro amado Castellano.

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  2. Agradezco tu obsequioso comentario. Y me alegro que hayas sabido tomar con humor el mío, que también llevaba ese rumbo.
    Recibe un afable saludo,... Nieves

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